"En medio de la noche, todo -el río, el campo, el bosque- estaba tan tranquilo y maravilloso como si en el mundo no existiera ni el odio, ni las traiciones, ni la vejez, sólo el amor correspondido. La nubes flotaban sobre la luna, que a su vez caminaba sobre el velo que envolvía la Tierra."
Vasili Grossman,
Vida y destino, p. 210
Marc Chagall