"...yo no quiero la absolución de mis pecados. No diga que son culpables los
que te obligan, que tú eres un esclavo, y que no eres culpable porque
no eres libre. ¡Yo soy libre! Soy yo el que está construyendo un
Vernichtungslager, yo el que responde ante la gente que morirá en las
cámaras de gas. Yo puedo decir: «¡No!». ¿Qué poder puede prohibírmelo si
encuentro dentro de mí la fuerza para no tener miedo a la muerte? ¡Yo
diré «no»! Je dirai non, mio padre, je dirai non."
Vasili Grossman, Vida y destino, p. 385