Gustavo Martín Garzo, La puerta de los pájaros, Con ilustraciones de Pablo Auladell, Impedimenta, 2014
La puerta de los pájaros es una fábula fantástica sobre aquellos tiempos en los que las cosas no eran como ahora, porque el mundo "estaba lleno de misterios y a nadie se le ocurría pensar que podía entenderse todo". El mismo Gustavo Martín Garzo nos habla en su artículo "El cuarto de los niños" de esta manera: "Estamos en el mundo de Sherezade, donde contar es pedir a la vida un día más. Contar para seguir en el mundo contemplando su locura y su belleza."
Porque la puerta de los pájaros es la que "sirve para acceder al silencio, a lo invisible del mundo".
Este libro de Martín Garzo y Los trazos de la canción de Bruce Chatwin, los he comenzado a leer al mismo tiempo. Los dos son libros que quizá jamás habría leído si no me los hubiesen regalado. Los dos son libros en los que la magia, la fantasía y la imaginación son las principales protagonistas. Los dos son libros que en sus primeras páginas mencionan los Sonetos a Orfeo de Rilke. Los dos son libros que crean el mundo a partir de palabras o de canciones. Nada existe si no ha sido pronunciado, si no ha sido amado, si no ha sido cantado. Nada es nada si no tiene un nombre que la haga ser. Nada existe si no es amado por nadie.