Los nombres de los hermanos forman una pareja igualada de opuestos. Abel proviene del hebreo hebel, que significa 'aliento' o 'vapor': todo lo que vive y se mueve y es perecedero, incluida su propia vida. La raíz de 'Caín' parece ser el verbo kanah: 'adquirir', 'obtener', 'tener propiedad', y por lo tanto 'gobernar' o 'subyugar'.
Caín también significa 'forjador de metal'. Y puesto que, en varios idiomas -incluido el chino-, las palabras que designan la violencia y la subyugación están asociadas al descubrimiento del metal, quizá Caín y sus descendientes están predestinados a practicar la magia negra de la tecnología.
Bruce Chatwin, Los trazos de la canción, p. 223