Una puesta en cuestión de la supuesta superioridad de la racionalidad tecno-científica de la modernidad por parte de alguien que practica activamente el difícil arte del desaprendizaje, porque, tal como él mismo confiesa, "la tarea de desaprender activamente algunos de los propios mitos puede convertirse en una simple cuestión de supervivencia".
Porque... "en una cultura que rechaza cada vez más patentemente toda concepción de las relaciones humanas con la naturaleza fuera de ese marco unidimensional de racionalidad utilitaria, resulta extremadamente difícil plantear el problema de las íntimas relaciones históricas entre la tecnociencia moderna y las instituciones contemporáneas de dominación social."