viernes, 13 de marzo de 2015

la culpa

"La culpa es más fuerte que mi deseo de enmienda, la culpa me impide intentarla, y lo único a lo que puedo aspirar es a que esa culpa haya pasado, a que sea ya tan vieja que sólo le quepa perderse en las nieblas en que se desdibuja cuanto desde siempre ha acontecido, hasta que los trazos acaban fundiéndose y resultan indistinguibles: lo bueno y lo ambiguo y lo contradictorio y lo malo, los crímenes y las heroicidades, la malevolencia y el desprendimiento, la rectitud y el engaño, el rencor que jamás se atenúa y el perdón obtenido por la fatiga de la víctima... (...) ...no nos queda más remedio que manejarnos con lo que hemos hecho u omitido y distraer nuestra culpa o aplacarla, y a veces la única forma de conseguirlo es aumentarla, procurar que las nuevas culpas cubran las más antiguas y las ensombrezcan o difuminen o minimicen, hasta que por fin todas hayan pasado y no quede cabeza en el mundo capaz de recordarlas, ni malvada y rápida lengua para contarlas, ni siquiera tembloroso dedo para señalarnos como causantes de nada."

 Javier Marías, Así empieza lo malo, p. 448-449