"Se reconoce de manera general hoy por hoy que el medio ambiente físico quedará destruido dentro de poco por la contaminación bioquímica a menos que invirtamos las tendencias actuales de producción de bienes físicos. Debería reconocerse asimismo el que la vida social y personal está igualmente amenazada por la contaminación del Ministerio de Salud, Educación y Bienestar, subproducto inevitable del
consumo obligatorio y competitivo del bienestar."